martes, 16 de agosto de 2011

No tenga envidia tu corazón

 
Devocional # 44                  16 agosto 2011

No tenga tu corazón envidia de los pecadores, antes persevera en el temor de Jehová todo el tiempo. Porque ciertamente hay fin, y tu esperanza no será cortada. Proverbios 23:17-18

Cuando vemos cómo prosperan los pecadores, fácilmente somos tentados por la envidia, y cuando oímos el canto de su regocijo mientras nosotros estamos afligidos,
casi llegamos a creer que se han llevado la mejor parte.

Pero pensar así es insensatez y pecado. Si los conociéramos mejor y consideráramos su fin, serían para nosotros objeto de lástima.

El remedio contra la envidia consiste en vivir constantemente en el sentimiento de la divina presencia, en la adoración y continua comunión con Dios.

Una religión verdadera transportará nuestra alma a regiones superiores, donde nuestro juicio será más claro y más altos nuestros pensamientos.

Cuanto más penetrados estemos del cielo, menos codiciaremos el mundo. El temor de Dios ahuyenta la envidia de los hombres.

El golpe fatal contra la envidia es la serena meditación del futuro. Las riquezas y glorias de los impíos son vanas apariencias. Su brillo es pasajero y rápido se apaga. ¿De
qué aprovecha al pecador su prosperidad si es alcanzado del juicio de Dios? En cambio, el hombre de Dios tendrá como fin la paz y la bienaventuranza, y su gozo nadie se lo arrebatará.

Por lo tanto, despójese de la envidia y busque el verdadero contentamiento del espíritu. ¡Gloria sea a Dios que nos vino a dar la paz que el mundo no puede dar!


Bendiciones

Pbro. Gilberto Flores Elizondo;
                Pastor de:
La Iglesia Nacional Presbiteriana
     "Camino Verdad y Vida"
        Tel: (81) 8352 6165

                       y         gil@enelinternet.net 

1 comentario: